lunes, 4 de noviembre de 2019

Una lengua muy muy larga, de Lola Pons Rodríguez

Fue por Twitter. Algún enlace a alguno de los artículos de la autora, seguir su cuenta, leer los comentarios de algunos de los lectores de este deliciosa colección de perlas de divulgación sobre la historia del español. Poco a poco, con la miel de las curiosidades y el estilo fresco y desafectado, doña Lola fue ganando mi simpatía y revivificando en mí el cariño por el estudio de la Lengua Española.
El texto es muy asequible, y permite ser leído por fragmentos. Cada capítulo/artículo se lee muy deprisa. No soy un experto en el tema, y además lo que estudié está bastante oxidado, pero tengo que decir que he aprendido mucho de lo que me quedó de la carrera, y desaprendido unas cuantas cosas también.
Creo que algunos temas se podían haber exprimido un poco más, alargando con alguna paginita y moviendo el ecualizador un poco más hacia la divulgación. El saber me ha sabido a poco en varias ocasiones, sobre todo porque los conocimientos de la autora son extraordinarios.
También opino que la agrupación de artículos, que responde a un orden lógico, es menos adecuada para su lectura de corrido.

Retrato de Elio Antonio de Nebrixa de Retratos de Españoles ilustres (1791) publicado por la Real Imprenta de Madrid. Via Wikimedia Commons. Dominio público.

lunes, 13 de agosto de 2018

La nube negra, de Fred Hoyle

Al terminar el asombroso cálculo de Weichart el Director pensó que era conveniente requerir a todos los reunidos que se guardara secreto. Estuvieran acertados o equivocados no podría derivarse nada bueno por hablar fuera del Observatorio, ni siquiera en casa. Una vez que saltara la chispa la historia se difundiría como el fuego en un depósito de inflamables y estaría en los periódicos antes de nada. El Director nunca había tenido oportunidades para pensar bien de los reporteros de los periódicos y particularmente de su exactitud científica.


No recuerdo cómo llegué a este libro, pero sí cómo me sedujo. Los primeros capítulos describen el mundo de la astronomía en los años centrales del siglo XX, y esa combinación de erudición y calma, de datos y conclusiones, la que que me conectó con la historia. Cuando el relato empieza a avanzar hacia pantanos más especulativos y ficcionales, se mantiene el tono de la narración y el estilo elegante de los diálogos, aunque la tensión vaya en aumento.

Aunque la historia rezuma sabiduría astrofísica, también ofrece una creatividad sorprendente. Es estupendo que se presuma al lector como un interlocutor capaz de seguir, aprender, compartir, disentir y disfrutar los intercambios de unos personajes agudos en su expresión y pensamiento.

No es para ti este libro si buscas fantasías espaciales con rayos láser y saltos al hiperespacio. Esto es ciencia ficción clásica, de la buena. Si te atraen la ciencia y las historias sólidas, lo vas a disfrutar.

Astronomical observatory in the forest. Odřejov, Czech republic. Photo by Martin Vorel.

domingo, 13 de agosto de 2017

El liderazgo al estilo de los jesuitas, de Chris Lowney

¿Qué distingue a los líderes movidos por el amor de los tiranos? Un gran afecto, junto con la pasión por ver que otros avancen a toda velocidad hacia la perfección. [...] Los líderes motivados por amor ansían ver que florezca el potencial latente y ayudan a ello. En términos más prosaicos, ¿cuándo alcanzan los niños, los atletas o los empleados su potencial total? Cuando los crían, les enseñan, los entrenan o los dirigen personas que infunden confianza, dan apoyo y estímulo, descubren el potencial y fijan altas metas.

Me recomendaron El liderazgo al estilo de los jesuitas en un curso hace ya siete años. Lo compré en seguida, pero he ido leyéndolo poco a poco. Esto es posible porque se trata de un libro muy accesible, ilustrado con historias personales de la historia de la Compañía, y ciertamente repetitivo. En alguna reseña he leído que se criticaba este último aspecto, pero lo cierto es que se trata de un recurso didáctico eficaz (e ignaciano).

Recomiendo este libro a las personas que en alguna dimensión de su vida (familiar, profesional, vocacional, artística...) se sienten llamados a inspirar -empezando por uno mismo-. Se entiende mejor si se tiene cierto conocimiento de los jesuitas y de su espiritualidad, pero no es en absoluto imprescindible. Es posible que, si no se tiene, la lectura del libro los inspire para acercarse.

La propuesta de liderazgo que hace el libro tiene que ver con los elementos fundamentales de la espiritualidad ignaciana, los Ejercicios Espirituales y el Examen Diario, pero son aplicables a cualquier contexto. Me resulta muy atractiva la propuesta de características que un líder ignaciano debe cultivar. Resulta una propuesta muy práctica y eficaz, y al tiempo profundamente humana y dotada de sentido. Creo que también ayuda a entender mejor qué tienen de particular los jesuitas y cómo llevan a cabo su misión. Echo en falta más historias (sobre todo, Arrupe), pero no se trata de una historia de la Compañía: los casos se traen para ilustrar y concretar las característas que se proponen como modelo.

La edición que yo he leído es una de Granica del 2006, pero hay una más reciente de Sal Terrae.

Saint Ignatius of Loyola. Engraving by F. Ludy after E. Steinle.
Iconographic Collections, via Wellcome Images.



viernes, 4 de agosto de 2017

Thank you for Arguing, by Jay Heinrichs

Whether you sense it or not, argument surrounds you. It plays with your emotions, changes your attitude, talks you into a decision, and goads you to buy things. Argument lies behind political labeling, advertising, jargon, voices, gestures, and guilt trips; it forms a real-life Matrix, the supreme software that drives our social lives. And rhetoric serves as argument’s decoder. By teaching the tricks we use to persuade one another, the art of persuasion reveals the Matrix in all its manipulative glory.

I came across some reviews of this book in Twitter. Having a linguistic background myself, I am interested in the use of language as a tool for something different to mere communication. I remember a Liguistics teacher at university who told us Rhetoric was despised and underrated, but could be very interesting to a philologist. It does combine an insight into how language works and the practical use of figures of speech which we typically associate with Literature.

So, the subject was attractive. Then comes style. It is really well written. It's fun, it is witty, and it is very easy to identify with. It's crammed with daily life examples, and contexts to which you can apply the concepts you learn about in the book. It is also rather practical for identifying attempts of manipulation.

The author himself is also a good reason to approach the text. He tells us about his experiences in using rhetoric at home, and sprinkles parenting and marital dos and don'ts. Tips for professional development are not scarce either. We can trust he's basing his advice on solid knowledge, which spans from the classics to state-of-the-art market research.

There is a Spanish translation in the works —the author himself kindly confirmed it.

Polyhymnia , Muse of eloquence (among other things). Unkonwn author - Jastrow (2006), Public Domain, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=1308649

jueves, 16 de febrero de 2017

El prisionero de Zenda, de Anthony Hope

Al poco penetré en el bosque y, durante una hora o más, caminé sumergido en la penumbra fresca y melancólica. Los grandes árboles se entrelazaban sobre mi cabeza en una enramada tan tupida que los rayos del sol se colaban a duras penas entre las hojas, destellando como diamantes. Era un lugar encantador, por lo que, cuando descubrí un árbol caído, me senté con la espalda apoyada en él y, estirando las piernas, me entregué a la serena contemplación de la solemne belleza vegetal y a saborear un buen cigarro.
Cuando hube concluido el cigarro e inhalado (imagino) tanta belleza como pude, concilié el más delicioso de los sueños, indiferente a mi tren de Strelsau y al veloz transcurso de la tarde. Acordarse de un tren en un lugar así hubiera sido puro sacrilegio: en lugar de ello, soñé que estaba casado con la princesa Flavia, que vivía en el castillo de Zenda y que pasaba días enteros con mi amada en los claros del bosque, todo lo cual era muy agradable. De hecho, estaba justamente depositando un ferviente beso sobre los labios encantadores de la princesa cuando oí (y la voz parecía al principio formar parte del sueño) que alguien decía con tono áspero y estridente:
—¡Esto es diabólico! ¡Afeitadle y será el rey!

Hay una web literaria en la que se usa el nombre de esta obra; y en ella se promociona una nueva edición muy cuidada. No he tenido la oportunidad de verla en mis manos, pero sí que tenía en casa, en mi larga lista de espera, otra que en una colección de aventuras editó El País hace años.

Parece que van llegando a mis manos libros sobre aventuras repentinas seguidas de muchas peripecias. Enfrentarse al desafío, lanzarse al viaje, y acabar siendo alguien distinto. El estilo de Hope es muy accesible, sin ornamentos ni excesos, que permite una lectura fluida a cualquiera. El relato cautiva desde la contraportada, discurre imprevisiblemente, y combina la aventura con gotas de humor. Como ejemplo de la novela de capa y espada, abunda la acción; una acción en la que el autor se esfuerza por que el lector imagine las escenas con fidelidad. En los diálogos se mezclan a partes iguales la inocencia de otras épocas con la lucidez de los fracasos y las desilusiones a los que el ser humano se enfrenta cada día. Por último, otro elemento que explica por qué ha atraído a tantísimos lectores es que es capaz de hacer al lector resonar con la creciente carga emocional de la historia. No es visceralidad, son impulsos, motivos y refrenos de personas reales y sensatas. Una gozada. 

La prosa dulce, el relato improbable, la acción, los diálogos y las emociones son los cinco motivos para zambullirse en este clásico. Aunque me temo que el chapuzón será corto. No sé si quiero, sin embargo, embarcarme en la secuela, Rupert de Hentzau, por temor a llevarme una decepción. Y por cierto, los textos en inglés y en español están disponibles en el Proyecto Gutemberg. Gratis y legal.

By Рекс Ингрэм (режиссёр) (Скриншот фильма) [Public domain], via Wikimedia Commons

domingo, 29 de enero de 2017

The Hobbit, by J.R.R. Tolkien

It was at this point that Bilbo stopped. Going on from there was the bravest thing he ever did. The tremendous things that happened afterwards were nothing compared to it. He fought the real battle in the tunnel alone, before he ever saw the vast danger that lay in wait. At any rate after a short halt go on he did; and you can picture him coming to the end of the tunnel, an opening of much the same size and shape as the door above.

If you have already read the book, this is for you:

Treading again on a long-ago followed path is a bittersweet experience. Familiarity provokes both relax and pleasure, since you are not eager to know what comes next (in general terms, you already know), but you're able to enjoy the details and sights of the trip. Finishing and farewells when you are in a more advanced moment of your life strike a different note. Not mere adventure -a mirror for your present context. Heraclitus was right, and books are rivers indeed. Go bathing, it'll do you good.

If you haven't, read this:

Films, merchandising, games and all have given people the idea that all Tolkien is connected to the geekish world around the turning of the century. Minding that this 'prequel' to The Lord of the Rings was actually written on the verge of the second world war is an interesting exercise. That is the world of which this book is both an echo and a escape. Being familiar with the history of English language (by the way, if you can spare a minute, this) will as well give you a sight of the depth of Tolkien's craftmanship.

You are over 16? Waste not a minute, and grab a copy. You're already late.